Muchas veces las dificultades para superar el trauma causado por el abuso tiene más que ver con las exigencias sociales con respecto a los grupos familiares, que en estos casos, actúan más como una secta que como personas que aman a los suyos.
Oigo muy a menudo decir cosas como que “por amor a mi familia estoy sufriendo” “no les digo nada por amor”
“a pesar del amor que les tengo he decidido poner distancias entre ellos y yo.
Yo discrepo en eso, porque creo que nos hace mucho daño: Por un lado, ese amor es falso, porque es obligado. Desde niños nos enseñan que “hay que amar a la familia”, sin embargo, en muchos casos no nos enseñan ese amor, sino que sólo nos lo imponen. Se puede dar el caso de un niño o niña que esté sufriendo malos tratos por parte de un miembro de la familia. Normalmente el resto del clan familiar va a mirar para otro lado y van a seguir imponiendo la exigencia del “amor a toda costa”.
Veamos otro ejemplo más común: Un niño o niña que no sufren malos tratos pero cuyos padres, o abuelos, o hermanos, le caen mal, le parecen retrasados en su manera de pensar, no le gustan o siente rechazo por ellos, por la razón que sea. Ese niño o niña nunca va a poder decir en voz alta que su familiar le cae mal, porque la exigencia social que nos impone amar a nuestro clan se lo prohíbe. Así, seguirá diciendo siempre que ama a los suyos, aunque sea mentira.
Esto puede causar graves conflictos internos a la persona. Para empezar se está mintiendo a sí misma cuando dice que ama, y está mintiendo a los demás también. Su raciocinio, su emocionalidad, su cognición, le dicen que no, pero su apariencia externa tiene que decir que sí.
Por supuesto esto pasa en todas las familias, pero en el caso de familias con malos tratos o abusos, estos conflictos se agudizan mucho más, y pueden llevar a la víctima a un sufrimiento indescriptible, de por vida.
Para que una persona pueda reponerse y superar los abusos del tipo que sean, tiene que admitir para sí misma cuáles son sus sentimientos auténticos para con sus familiares y su entorno cercano. Mientras la víctima siga diciendo “quiero a mi padre a pesar de lo que me hizo” no se podrá eliminar el trauma.
Así, el ejercicio más útil para empezar a sanar será poner a cada uno en su lugar. Por ejemplo:
“Papá me violaba, no puedo quererle. Me gustaría pero no puedo. Tengo sentimientos encontrados con respecto a él, entre ellos pánico, pero no siento amor, todavía no”
“Mamá sabía lo que estaba pasando pero miraba para otro lado. Todavía la odio por eso, la he odiado siempre, no siento amor por ella. Todavía no”
“Mi hermano (abuelo, profe, primo, etc.…) me hizo cosas horribles y todos le consentían. No siento ningún aprecio por él y no quiero volver a verle.”
Sólo ceder ante los verdaderos sentimientos que tenemos hacia las personas que nos hicieron daño, y reconocerlo en lo más íntimo, ya nos libera y nos devuelve parte de la fortaleza perdida. Rompemos la cadena que nos ata a la obligación de querer a pesar de todo, y nos da la oportunidad de empezar a querer de manera espontánea y auténtica, si así lo sentimos algún día. Y si no, no.
No se trata de odiar a los que nos hicieron mal, se trata de escapar de su influencia, para poder reponernos. Se trata de empezar de nuevo con unos valores y creencias propias, con unas emociones recompuestas y en orden, con las cosas claras y con cada uno en su lugar.
Gracias shanti.
Yo también callé durante años, entiendo lo difícil que es romper el silencio, de hecho si no me hubiese ayudado mi novio de por aquel entonces no se si habría sido capaz. En realidad, lo que ocurrió en mi vida al destapar el abuso se convirtió en un segundo trauma para mí. Pero a pesar de todo lo que tuve que pasar, a día de hoy me alegro profundamente de que se rompiese el silencio. Se que gracias a ello todo empezó a tomar el rumbo que debía.
Te cuento:
Acababa de cumplir los dieciséis cuando tras un año saliendo juntos mi novio me dio fuerzas para contárselo a mis padres (entonces mi hermano difícilmente conseguía más que rozarme pero el cabrón no dejaba de intentarlo).
Aquella mañana no fui a clase, estaba fatal solo de pensar en lo que tenía que hacer, así que fui a casa de mi novio para intentar armarme de valor, pero no fui capaz… mi novio viendo que mi alma no podía soportar aquello se ofreció a contárselo él, a lo que yo rápidamente contesté ‘si, si’, y así se hizo.
Mira, aquello fue la apoteosis… yo suelo llamarlo el día en el que se destapó el pastel pero más bien fue el día que estalló el volcán, creo que mis padres no pudieron hacerlo peor a no ser que hubiesen consentido que aquello siguiese pasando. Mis miedos se confirmaron y con creces, sentía muchísima vergüenza pero jamas habría pensado que no me fuesen a creer… menos mal que mi hermano lo reconoció sino no se por cuanto tiempo habrían dudado de mi.
Yo, después de que mi novio volviese contándome que se habían vuelto locos que creían que él me había dejado embarazada y que en realidad esta historieta que venía contándoles era una tapadera.. me asuste infinitamente más! Todo fue un caos que escapó a mi control. Mi madre me llamaba, yo no quería cogerlo, llamaba a la madre de mi novio, yo no quería ponerme…pero después de que me dijesen que mi hermano lo había admitido…al final accedí a hablar.
Pero me vi obligada por mis padres a que las cosas fuesen como ellos pensaban que tenían que ser: yo tenía que salir de la casa de mi novio inmediatamente y reunirme con ellos a solas en la casa de mi abuela; yo no quería ni de broma pero la madre de mi novio me convenció muy dulcemente. Cuando llegué mi hermano estaba con ellos!!! ellos tres estaban sentados frente a una silla vacía (mi silla), me obligaron a sentarme, le obligaron a pedirme perdón.. yo estaba aterrada, no me salían las palabras, ellos me dijeron que estaba muy rara que no parecía yo misma, que hablaba como la hermana de mi novio (???)… me fui por donde había venido…
Mi madre volvió a llamar a la medre de mi novio…que bajase inmediatamente que mi padre me esperaba en la puerta con el coche. La madre de mi novio me dijo que tenía que ir con mi familia que todo se estaba poniendo muy tenso y que estaban empezando a pensar que me estaban comiendo la cabeza y que me tenían retenida…yo no quise causar problemas a nadie así que bajé. Mi padre nervioso perdido me “cogió” como al vuelo y arranco el coche. Me dijo que mi abuela se había puesto peor de la ulcera y que íbamos al hospital a verla, allí nos esperaba mi madre. Mi yaya estaba muy malita, nos quedamos a pasar la noche con ella mi madre y yo. En la cafetería mi madre me soltó que mi hermano había dicho que yo lo había consentido todo, yo solo pude contestar mirando a la mesa: no, eso no es verdad.
Al día siguiente en el colegio supe que mis padres habían ido como locos a buscarme inmediatamente después de enterarse, y que al no encontrarme allí habían puesto el grito en el cielo. Todo el mundo me preguntaba, yo era incapaz de decir nada, mi mejor amiga se enfado conmigo por no querer contarle lo que había pasado (???). Los profes pensaban que había sido un problema de drogas, el profesor de gimnasia me interrogaba. Solo sentí un poco de apoyo por parte de un par de chicos, uno de ellos solía meterse conmigo y con el otro tampoco tenía mucha relación. Al año siguiente cambié de colegio (a un instituto horrible por cierto).
Desde entonces la única obsesión de mis padres fue que todo volviese a la normalidad, que mi hermano y yo nos reconciliásemos (cosa que hasta he intentado…), de hecho las siguientes navidades nos fuimos todos juntos a un super viaje a África (???) haciendo como si no hubiese pasado nada.
Yo lloraba histérica y desconsoladamente todas las noches, pero cuidándome de que no se dieran cuenta, pues ellos no paraban de decir lo destrozados que estaban.
Entonces pensaba que era una cobarde pero desde hace tiempo se que fui todo lo valiente que se puede ser en una situación así.
Nuestra intuición nos dice que contarlo no va a ser un campo de rosas, conocemos a nuestra familia, sabemos como reaccionan, como piensan, como se mueven y hasta como respiran…sabemos que estamos vendidos y puede que estemos solos y no llegamos a imaginar lo que podría suceder.
Te entiendo perfectamente ROMPER EL SILENCIO ES UN MUNDO! y que nadie se atreva a decir lo contrario. AHORA, ES IMPORTANTÍSIMO.
En el barco de mi vida sólo iba yo y no llevaba más que una vela, avanzaba pero no elegía el rumbo. Tras romper el silencio empece a ir a terapia, mi psicóloga fue mi timón, yo el capitán, y más adelante mi pareja, mi mejor amiga y finalmente mis padres se sumaron a la tripulación y hemos conseguido llegar a buen puerto. jeje.
Animo shanti eres muy valiente! solo que tu intuición te dice que ¡cuidado! para cruzar has de pasar un campo de minas. Animo, somos supervivientes!! Un fuerte abrazo!!!!!
Animo MAría, que fuerza transmites, imagino que no ha sido nada fácil decirles a tus padres algó así, mi hermano también abusó de mí, yo no he podido decirlo, ni lo haré, vivo en esa contradicción pero leer testimonios como el tuyo da fuerza, esperanza, y leer cosas como éstas te hacen pensar que un mundo diferente es posible. ánimo con tu nueva etapa en el Gam, seguro que conseguirás todo lo que te propongas en la vida….. un abrazo!!!!
Hola a tod@s,
Llevo meses leyéndoos y hoy por fin me decido a participar. La verdad siempre me ha costado enormemente escribir sobre mi vida. Cuando era pequeña me negaba a escribir un diario, incluso aunque nos lo pusieron como deberes un verano, escribí una página y por supuesto ni una sola palabra sobre mí, eso habría significado pararse a analizar mi mundo… Para mi la familia es y fue maravillosa y horrible al mismo tiempo. A los ojos de los demás siempre fue maravillosa claro, y yo una princesa que tenía y hacía cosas raras como arrancarse los pelos de las cejas y las pestañas. Pero la necesidad de un psicólogo siempre fue mal vista en todo mi entorno…Hasta cuando con dieciséis años destapé el pastel a mis padres les pareció raro que insistiese en ir al psicólogo… Mi hermano, casi nueve años mayor que yo, abuso de mi desde los seis (creo recordar) hasta los dieciséis, incluso después de que mis padres lo supiesen y haberme pedido perdón lo volvió a intentar una ultima vez!! Mis padres primero no me creyeron hasta que llamaron a mi hermano y lo reconoció todo (pensaban que mi novio me había dejado preñada o algo así…). Después siempre intentaron que mi hermano y yo nos reconciliásemos, querían imponer la normalidad, hacer como si no hubiese pasado nada, me preguntaban que tal estaba con mirada cándida, le quitaban importancia, me hacían preguntas concretas muy desagradables, no paraban de decir lo destrozados que estaban, pero no querían oír nada sobre la cruda realidad. No querían?! pues la han oído hasta que han dejado de revolverse y taparse los oídos. Tras unos tres años de terapia empecé de nuevo a romper el silencio y esta vez con una entereza y una determinación imparables, y nunca he tenido la necesidad de ser explicita o contar más de lo que quería. Yo siempre he sido muy correcta a la hora de comunicarme con ellos pero es que la cruda realidad por mucho tacto que uno tenga es dura y duele. Cada vez que han dicho que les estaba machacando les he contestado ‘vosotros lo que queréis es no saber nada y que me machaque y sufra en silencio yo sola como he hecho durante toda mi vida’ …y mi padre se sigue preguntando y echándome en cara por qué no dije nada cuando era una niña… yo alucino! ¡¡¡pero la verdad tiene más fuerza que su manipulación!!! y con la verdad por delante tras diez años de terapia, de caer, levantarme, luchar, caer más hondo, volver a levantarme, aprender, aprender y aprender, y seguir resurgiendo como el ave fénix de mis cenizas una y otra vez, a mis veintiséis años puedo decir que lo he conseguido, ¡en esta casa se me escucha alto y claro!
Tras un año durísimo para todos (esa es otra historia muy larga) por fin el indeseable esta en su lugar (bueno casi casi). Ahora… para con el tema de ‘el Indeseable’ todavía tengo mucho que trabajar… pero por fin me he quitado esa presión familiar que me hacía creer que debía atesorar su ”lado bueno” e intentar quererle.
Espero que esta parte de mi historia os de fuerzas, un abrazo a tod@s!
P.D: pronto empezaré el GAM, estoy muy emocionada pero hecha un flan jeje.
Es cierto que la sociedad como a todo pone etiquetas, en este caso la de familia. También es cierto que nunca se nos pasa por la mente “no querer” a los miembros de nuestra familia. Precisamente lo que hace difícil ese amor-odio que sentimos por los abusadores (en este caso familiares), y por eso la confusión de ” lo quiero o no lo quiero”. Si una persona desconocida abusa de nosotros, es alguien con quién nunca hemos tenido trato, no lo conocemos,…sin embargo el echo de que sea alguien quién se supone que nos tiene que proteger precisamente por ser de nuestra familia, es lo que nos desconcierta. Cuando se le dice a un niño, no cojas caramelos de un desconocido, se olvidan de decir, que quizá sea un familiar quién te los quiera dar a cambio de algo. Se conciencia a los más pequeños sobre las personas desconocidas, pero nunca de un padre, madre, hermanos, primos, tíos, abuelos…por que nuestra mente no concibe que eso pueda ser, cuando la probabilidad más alta de sufrir abusos en dentro del círculo familiar. Quizá por eso nos resulta más difícil decir “no quiero a esta persona por que me ha hecho daño”.
Animo Shanthi,es la primera vez que te encuentro sin palabras….
Leyéndolas a todas ,no me queda mas remedio que a veces los abusos ,son ayudados por una familia muy peculiar…
Mi madre ,a la que odio enconadamente,pero no abiertamente,es como un elefante entrando en una chatarrería.
Hoy he ido a ayudarla a ella y a mi padre a hacer conservas de tomate. A la hora de hacer la comida ,se ha ido a la cama,según esta muy mala.hemos comido sobras de otros dias de dudosa conservación. Me ha dado un asco que me moría. Me hubiera ido de no ser porque mis hijos se hubieran dado cuenta. Es tan egoísta que ni siquiera pensara que hace daño. Después cuando me iba me ha dado 50 € ,nunca le cojo el dinero,pero me hace sentir como una puta. Si voy a ayudarla siempre va con el dinero por delante,lo odio,es una manera de comprarte ,para mi seria suficiente con un gracias o un beso sincero. Es horroroso el trato de una madre Asi a su hija. Sigo pensando ,que personas Asi ,son las que queriendo o sin querer hacen mas fáciles los abusos de parte de familiares. El odio se ha apoderado de mi.
Para mí también es muy dura esta entrada… Llevo unos días difíciles conmigo misma pero ahora han aumentado los problemas a mi alrededor. Tengo que estar con mi familia y quiero estar porque quiero ayudar a mi tía y a mi prima. Sé que me necesitan a su lado, que necesitan mis abrazos, que les haga reír y verlas sonreír compensa todo… Mi tío ha estado fuera, vuelve esta tarde. Eso me ha ayudado a estar fuerte y bien.
Mi tía se cayó ayer, se ha fracturado la muñeca… He pasado la mañana con ella y con mi prima ayudándolas. Hace un rato mi tía me pidió que le guardase un cacharro de cocina debajo de su cama, donde mi tío abusó de mí… He seguido adelante tan normal. Creía que no me había afectado pero ahora mismo acabo de volver a casa. Estoy en mi cuarto sola y he roto a llorar de una manera… No puedo parar de llorar, me encuentro fatal ahora mismo… Otra vez mal…
MI tío abusó de mí, he sentido de todo por él. Hace un mes creí que empezaba a sentir lástima pero ahora mismo no sé lo que siento. Mi familia está rota por su culpa. Es un sinvergüenza. Posiblemente tendríamos los mismos problemas ahora pero al menos se harían mucho más llevaderos. Lo que hizo es como una niebla que está ahí, que lo cubre todo y todos la notamos pero hacemos como si nada. Llevo mucho tiempo deseando con todas mis fuerzas ser capaz de perdonarle pero ahora mismo no puedo. Sigo sin ser capaz y me empiezo a plantear que tal vez no lo perdono porque en el fondo no quiero hacerlo…
La entrada de hoy es particularmente dolorosa para mí, refleja exactamente lo que siento, lo que me pasa, la dualidad en la que vivo, la culpa, los deberías, el amor a mi madre, la impotencia de ver como mi tío se pasea por allí cuando quiere y mi hermano viviendo con ellos…… hoy me llamaba mi madre, me preguntaba qué me pasa porque me siente extraña y como no te veo mi niña estoy preocupada….. cuándo vienes????? no supe contestar, un nudo se me hizo en la garganta y cuando colgué rompí a llorar…… un sufrimiento indescriptible……no puedo decir nada más…..